miércoles, 13 de marzo de 2013

El Salvador y el Holocausto

"Durante los últimos años de la guerra, cuando los trenes cargados de deportados recorrian el trayecto que va de Budapest a Auschwitz, el nombre de esta pequeña República era pronunciado por los judíos de Budapest con más esperanza aún que el de los Aliados o de los Rusos que avanzaban. De la nada, El Salvador se les había aparecido, como su nombre lo implica, como su salvador."

Todo se inicia cuando el Primer Secretario en nuestro Consulado en Ginebra, Suiza, George Mandel-Montello, un judío de origen rumano, le sugiere al Cónsul General, Coronel José Arturo Castellanos, estudiar la posibilidad de emitir certificados de ciudadanía salvadoreña a judíos de diversas partes de Europa, a fin de rescatarlos de las garras opresoras de Hitler. Con el aval del Gobierno de El Salvador, se extendieron masivamente certificados de ciudadanía salvadoreña, lo cual permitió a los portadores permanecer bajo la protección de la Cruz Roja. Nuestro país se convirtió en el único que entregó documentos de ciudadanía y no solamente visado de viaje, sin reservas y sin costo alguno.

Y es así como los “salvadoreños” formaron la comunidad extranjera más numerosa de Hungría. El 4 de julio de 1944, el Gobierno de El Salvador solicitó formalmente al Gobierno Suizo, que los salvadoreños en Hungría quedasen bajo la protección del Consulado Suizo en Budapest. Ante la anuencia del Gobierno Suizo, el Canciller salvadoreño, Julio Enrique Ávila envío el 22 de julio de 1944 el siguiente radiograma “excelentísimo señor pillet golaz, consejero federal, jefe departamento político federal, berna. agradecemos bondadosa deferencia aceptar representación en hungría, la cual se extendería a ciudadanos salvadoreños que pudieran estar aquella jurisdicción y a sus intereses privados. antes de ahora ninguna nación ha ejercido tal representación. atentamente julio e avila ministro relaciones exteriores de el salvador”.

La acción salvadoreña ha sido reconocida en varias ocasiones por la Liga Anti Difamación de los EEUU, por el Comité Judío Americano, por la Asociación Visas for Life. En Abril de 1999, la Municipalidad de Jerusalén honró a la nieta del Cónsul Castellanos, al inaugurar la calle El Salvador en el vecindario de Givat Mesua y en septiembre del 2001 se inauguró la Plaza El Salvador.

El 22 de noviembre de 1995, el entonces Presidente de los Estados Unidos, Bill Clinton, en su carta a la Liga Anti Difamación escribió: “ En el tiempo de la historia humana cuando demasiadas personas volteaban la cabeza y desviaban la mirada, el Gobierno de El Salvador demostró al mundo el poder de la compasión frente a la injusticia. Su coraje durante la ocupación nazi de Hungría, tal como la demostraron tres extraordinarios diplomáticos salvadoreños, nos sirve a todos como ejemplo de altruismo. Durante un período de gran oscuridad estos héroes llenaron las vidas desesperadas con esperanza, y confío que sus acciones perdurarán como inspiración para las generaciones venideras.”

1 comentario:

  1. Gracias por la historia que desconoce la gran mayoría de Salvadoreños, de nuevo: Gracias!

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